El Narciso
El narciso, también conocido como Narcissus (su nombre en latín), tiene varias formas y colores (naranja, amarillo, blanco), y le gusta crecer inicialmente en los bosques. Una flor muy hermosa y delicada.
El narciso representa el renacimiento y el comienzo de algo nuevo. El narciso sale a finales del invierno y se ofrece principalmente en ramos. En la historia el narciso es la flor emblemática de los cazadores a pie y de los cazadores alpinos.
El narciso es una delicada flor de primavera, una flor radiante tan alta como tres manzanas. El narciso puede verse en jardín en macizos o en el campo en manchas dispersas. Sus tallos de 20 a 40 cm de altura, coronados por una cabeza dorada, captan la atención.
Llamado narciso por su sorprendente parecido con el junco, es un miembro de la familia de los narcisos. De hecho, todas las variedades de narcisos suelen llamarse erróneamente narcisos, mientras que ésta es sólo una variedad específica de narcisos: narcissus juncifollius.
Aunque el amarillo es el color que se suele asociar a los narcisos, no es raro encontrarse con otros colores. Se puede encontrar en el mercado narcisos blancos o rosa pálido, o narcisos con el corazón naranja. El dulce aroma del narciso es muy popular, pero a veces puede resultar embriagador. Por lo tanto, no es aconsejable ofrecerlos a personas en lugares cerrados como hospitales o residencias de ancianos.
Un Símbolo
En el lenguaje de las flores, el narciso es portador de un mensaje de amor sincero y de deseo impaciente, expresa una expectativa profunda y galante que desearía ser satisfecha, pero de forma sutil y velada, con toda discreción. Sin embargo, también puede conllevar una especie de ultimátum que indica que la persona que declara su amor espera una respuesta rápida.
Ya sea un amor de larga duración o una declaración repentina que requiere un retorno sin esperar. El narciso es, por tanto, símbolo de un amor ardiente que sólo quiere vivir su pasión y su deseo.
De forma más general, el narciso es un signo de prosperidad y riqueza deseado por uno mismo o por un ser querido. También puede tomarse a contrapelo y ser una representación del egoísmo de la persona que lo recibe, una especie de regalo de doble filo.
Plantación y cuidados
El narciso es una planta bulbosa. Es el bulbo que debe plantarse entre septiembre y noviembre. Debe enterrarse al menos a tres veces la profundidad del bulbo en un suelo bien drenado. Esta planta prospera entre la luz y la sombra. Por lo tanto, necesita un lugar donde la luz sea tenue. El pie de un árbol es perfecto, así como la sombra de un comedor.
Después, hay que aplicar un poco de abono. El riego debe ser moderado. Si todo va bien, a partir de febrero florecerán hermosos narcisos. Pueden seguir floreciendo hasta mayo.
Al año siguiente, hay que esperar a que las hojas estén amarillas. A continuación, corte la flor a ras del suelo. Entonces hay que esperar a la siguiente floración. Un consejo adicional para preparar un ramo de narcisos: remojar las flores durante dos horas en agua helada. Así durarán más tiempo en el jarrón.